Paris: La Cité de la Lumière
marzo 16, 2021Paris: La Cité de la Lumière es como esos codiciados perfumes franceses, gustosos e intensos, pero contenidos en un pequeño frasquito. Este juego nos lo encontraremos en una pequeña caja, pero la idea que alberga es muy original y elaborada. Se nos presenta un enfrentamiento entre 2 jugadores, donde se luchará por tener la mejor colección de edificios iluminados. Habrá que idear estrategias para conseguir el máximo de puntos, a la vez que intentaremos tirar por tierra los planes del rival.
Paris: La Cité de la Lumière es un título de José Antonio Abascal, publicado por Devir. Un auténtico pelotazo que se ha expandido rápidamente por múltiples países, señal de que estamos ante algo de calidad. Además, Devir ha anunciado para este año una nueva expansión… No te pierdas el tutorial y la reseña de este pequeño juegazo.
París, 1889. La gran exposición universal es la excusa perfecta para maravillar al mundo con el poder de la electricidad. Si París ya se consideraba la ciudad de la luz desde principios de siglo, gracias a la red de farolas de gas, la implantación de la iluminación eléctrica pública maravilló al mundo.
– Fragmento de la introducción del reglamento de «París: La Cité de la Lumière».
CONTENIDO DE LA ENTRADA
FICHA TÉCNICA
- Nº jugadores: 2
- Edad recomendada: 8+
- Año de publicación: 2019
- Editorial: Devir
- Autor: José Antonio Abascal
- Artista: Oriol Hernández
- Idioma: español
- Independencia del idioma salvo reglamento: Sí
- Ficha en la BGG
¿CÓMO SE JUEGA?
«Paris: La Cité de la Lumière» es un juego abstracto muy estratégico, donde los jugadores intentarán obtener la mayor cantidad de puntos al final de la partida. Estos se obtienen construyendo edificios que queden bien iluminados por las farolas del alumbrado público. Veamos a continuación cómo ocurre todo esto.
ELEMENTOS DEL JUEGO
«Paris: La Cité de la Lumière» se compone de los siguientes elementos:
TABLERO
El tablero de juego se encuentra integrado en la propia caja. Es una superficie de 4×4, donde se irán colocando losetas de adoquines entre sus márgenes.
LOSETAS DE ADOQUINES
Las losetas de adoquines son las que se colocarán sobre el tablero. Cada jugador tiene 8 propias, fácilmente identificables por su reverso.
Estas losetas están divididas en 4 cuadrantes. Estos cuadrantes pueden mostrar diferentes colores, lo que indicará diferentes cosas:
- Azul: casilla propiedad del jugador azul.
- Naranja: casilla propiedad del jugador naranja.
- Morado: casilla mixta, de uso para ambos jugadores.
- Blanca: casilla que contiene una farola (como se ve en su ilustración).
LOSETAS DE EDIFICIO
Hay 12 losetas de edificio, representados como poliominós de diversas configuraciones. Los colores que tengan no es algo significativo, ya que la propiedad del edificio se indica poniendo chimeneas del color del jugador correspondiente.
La distribución de los edificios encajará con las casillas que tienen las losetas de adoquines y serán colocados durante la partida sobre éstas.
CHIMENEAS
Hay 7 chimeneas azules y otras tantas naranjas. Cada jugador colocará sus chimeneas sobre los edificios que construya para indicar su propiedad.
POSTALES
Las postales tienen acciones especiales que influyen de diversas maneras sobre la partida. Hay en total 12, pero por partida sólo se usarán 8.
Por una de las caras mostrará la información relativa a su acción y por la otra, una ilustración. Las que tienen un sello postal, indican que influyen en la puntuación de la partida.
También cabe mencionar que hay 8 postales con un símbolo de una estrella en ellas. Éstas son las recomendadas para las primeras partidas, por la sencilla aplicación de sus efectos.
INDICADORES DE ACCIÓN
Hay 4 indicadores de cada color. Sirven para que los jugadores los sitúen sobre las postales para apropiarse de ellas.
OTROS ELEMENTOS
Existen otros 9 elementos especiales relacionados con las acciones de las postales. La mayoría son losetas, fácilmente identificables por contener el símbolo de un gato negro y por la referencia que se hacen a ellas en sus correspondientes postales. Se entenderá su uso cuando se llegue a la explicación de las mismas.
PREPARACIÓN Y CONCEPTOS BÁSICOS
Las partidas a «Paris: La Cité de la Lumière» se preparan muy rápidamente:
- Situar el tablero del juego en el centro de la mesa.
- Elegir 8 postales al azar y colocarlas en torno a él, por la cara que muestra la acción. Se recomienda, en las primeras partidas, usar las marcadas como postales de iniciación.
- Colocar los elementos especiales que pudieran estar vinculados a las postales junto a ellas.
- Crear una reserva general de losetas de edificios.
Por último, a realizar por ambos jugadores, con sus respectivos colores:
- Barajar sus losetas de adoquines y dejarlas en un mazo enfrente suyo bocabajo.
- Coger sus chimeneas e indicadores de acción.
- Roba la primera loseta de adoquines.
Se elige el jugador inicial, facilitando que sea el que perdió la anterior partida.
SECUENCIA DEL JUEGO
A «Paris: La Cité de la Lumière» se juega en 2 fases. En la primera se irán colocando losetas de adoquines en el tablero y reservando edificios. En la segunda se colocarán los edificios reservados sobre las losetas de adoquines y se conseguirán los beneficios que otorguen las postales. Ambas fases se jugarán alternándose el turno entre ambos jugadores, tal y como se explica a continuación.
FASE 1
Empezando por el jugador inicial, cada uno podrá realizar un turno, donde deberá elegir entre colocar una loseta de adoquines o adjudicarse un edificio. Sólo podrá hacer una de las 2 opciones cada vez que le toque (siempre y cuando existan los elementos necesarios para realizar la correspondiente acción).
Esta fase terminará cuando las 16 losetas de adoquines se encuentren situadas sobre el tablero. El jugador que antes coloque sus losetas será el jugador inicial de la siguiente fase.
En el caso de que un jugador coloque sus 8 losetas de adoquines, cuando le toque, siempre podrá elegir coger un edificio (si queda alguno) o simplemente pasar, hasta que llegue el momento en el que el otro jugador también coloque todas sus losetas y se pase a la segunda fase.
COLOCACIÓN DE LOSETAS DE ADOQUINES
Colocar una loseta de adoquines consiste en situar la que se tiene en la mano en uno de los 16 huecos del tablero. Debe ocupar uno de esos huecos de manera integral. Por supuesto, debe mostrar la cara de los adoquines.
Se puede girar la loseta lo que se quiera y no es necesario que esté adyacente a otra. En ese aspecto hay libertad total. Tras colocarla, si el jugador aún tiene más losetas en su mazo, deberá robar una.
ADJUDICACIÓN DE EDIFICIOS
El jugador elige uno de los edificios de la reserva general y lo coloca enfrente suyo. Este edificio tendrá utilidad durante la siguiente fase. Se recomienda acabar la fase 1 con al menos 3 o 4 edificios adjudicados.
FASE 2
Esta última fase se juega alternando turnos, como en la anterior. El jugador inicial será el que antes puso todas sus losetas de adoquines en la anterior fase. Ahora, en el turno de cada jugador, debe elegirse entre colocar un edificio o elegir una postal. Un jugador sólo puede hacer una de esas dos opciones cada vez que le toque (siempre y cuando existan los elementos necesarios para realizar la correspondiente acción).
Esta fase termina cuando ningún jugador pueda colocar más edificios y todas las postales estén elegidas. Entonces, sólo quedará pasar a contabilizar los puntos de cada jugador.
COLOCACIÓN DE EDIFICIOS
Para colocar un edificio que se tenga reservado, sólo hay que elegir dónde ponerlo. Su posicionamiento debe encajar completamente en las casillas que muestran las losetas de adoquines y debe situarse sobre espacios exclusivos del color del jugador o bien morados (que son mixtos). En ningún caso podrá ocupar un espacio del otro jugador o un espacio de farola.
Tras situar el edificio, el jugador debe colocar una chimenea suya encima para marcarlo como de su propiedad.
SELECCIÓN DE POSTALES
Un jugador puede elegir una postal que esté sin usar, realizar la acción que ésta facilite y la voltea colocando uno de sus indicadores de acción sobre ella. Cada postal cuenta con una acción especial diferente, que se explicará en la siguiente sección.
También cabe la posibilidad de elegir una postal y no hacer uso de su efecto (por ejemplo para quitarle la opción de usarla al rival).
REGLAS ADICIONALES
Las únicas normas especiales son las que corresponden a cada postal y son las siguientes (las 4 últimas no son postales de iniciación):
LEVITATION
Cambia uno de tus edificios reservados por otro de la reserva general y colócalo en el tablero.
METROPOLITAIN
Cuando se elige la postal, simplemente se deja el indicador sobre ella, pero todavía no se utiliza ni, por tanto, se le da la vuelta. En algún turno posterior, podrás utilizar su efecto que permite colocar un edificio ocupando una casilla de farola, que deja de existir de cara a la iluminación.
JARDIN DES PLANTES
Coloca la ficha de jardín sobre casillas de tu color o mixtos. Esta ficha se considera un edificio de tu propiedad, por lo que hay que colocarle una chimenea para identificarlo.
SACRÉ COEUR
Al final de la partida, quien controla esta postal, no perderá puntos por tener edificios en su reserva sin haber sido utilizados.
LE PEINTRE
Coloca el pintor en una casilla de tu color. Al final de la partida, otorga 2 puntos por cada farola que haya en su área. Ésta viene delimitada exclusivamente por los edificios y los límites del tablero.
CHARTIER
Cuando se elige la postal, simplemente se deja el indicador sobre ella y coge la loseta de casilla mixta, pero todavía no se utiliza la acción, por lo que no se da la vuelta a la postal. En algún turno posterior, puedes colocar la loseta de casilla de adoquines mixta sobre una casilla de adoquines del rival. Tras esto, coloca de inmediato un edificio o ficha de fuente, ocupando la casilla de adoquines recién colocada.
BOUQUINISTES SUR LA SEINE
Coloca la ficha de anexo de edificio sobre una casilla de tu color, uniéndola a un edificio de tu propiedad. Este anexo aumenta el tamaño de tu edificio en 1.
LAMPADAIRE
Coloca la loseta de farola sobre una casilla de tu color.
MOULIN ROUGE
Coloca la ficha de bailarina en un espacio de tu color. Al final de la partida se obtiene 1 punto por cada casilla libre del área que ocupa (incluyendo su propia casilla). Este área se delimita con edificios, farolas, los límites del tablero o cualquier otro elemento que cubra las losetas de adoquines.
FONTAINE DES MERS
Coloca la ficha de la fuente sobre casillas de tu color o mixtas. Al final de la partida da 3 puntos por cada edificio de tu propiedad en contacto ortogonal con ella.
LE PENSEUR
Coloca la estatua en una casilla de tu color, teniendo que estar la casilla frente a ella libre. Al finalizar la partida, se obtiene 2 puntos por cada casilla libre adyacente ortogonalmente a ella y 1 punto por cada casilla libre adyacente diagonalmente. Si la casilla de enfrente acabase ocupada, no entregará ningún punto.
LA GRANDE LUMIÈRE
Coloca la ficha de la gran farola sobre una casilla de farola normal. La gran farola ilumina 2 casillas por cada lado y 1 en diagonal. De cara a iluminar edificios, tiene mayor rango de acción. Se debe tener en cuenta que los edificios tapan la luz y evitan que traspase a otros que estén detrás suyo (otros elementos del juego no bloquean la luz, sólo los edificios).
FINAL DE PARTIDA
Tras concluir con la segunda fase, toca contar los puntos de cada jugador. Se deberá tener en cuenta lo siguiente:
- Edificios iluminados: multiplica el tamaño de cada edificio de cada jugador por la cantidad de farolas diferentes que le iluminen. Las farolas iluminan sólo las casillas adyacentes ortogonales a ellas. La cantidad resultante serán puntos para el jugador del edificio.
- Edificios agrupados: cada jugador busca la aglomeración más grande de edificios suyos (la iluminación da igual en este aspecto). Estos edificios deben estar adyacentes de alguna manera ortogonal. El tamaño de la agrupación de edificios es la cantidad en puntos.
- Edificaciones pendientes: los jugadores que aún tengan en su reserva losetas de edificios sin poner en el tablero, deberán restarse 3 puntos por cada una.
- Postales: algunas postales cuentan con un sello, que indica que pueden influir en la puntuación final de alguna manera. Deberá aplicarse los efectos de la postal como corresponda.
El jugador con más puntos será el ganador. En caso de empate, ganará el jugador que tenga más casillas de su color a la vista en el tablero.
LOS COMPONENTES
Paris: La Cité de la Lumière es un juego de caja pequeña, bellamente ilustrado y con unas características de diseño bastante particulares. Para empezar, el tablero se encuentra integrado en la propia caja, con varias alturas para hacer que encajen cómodamente las losetas sobre él cuando se juega.
En cambio para almacenar todo su contenido, deberemos hacer uso de bolsitas zip y no todo entra de una manera sobrada. Remarco que entrar entra, pero creo que un par de milímetros más de profundidad harían más fácil esta labor.
Las losetas de edificio son de cartón a doble altura, mientras que el resto de fichas y losetas son de cartón con una única altura. Son de buena calidad y de un grosor apropiado. Los elementos encajan a la perfección en el tablero y combinan entre ellos de una forma muy acertada.
Las postales son preciosas y cuentan con una iconografía clara que facilitan su comprensión. De todas formas será inevitable acudir ocasionalmente al manual para refrescar qué hacían algunas de ellas. Una pena que no se incluya un par de hojas de ayuda para cada jugador.
Las chimeneas tienen un diseño característico, muy bien tematizadas. Son de madera y muestran el color de cada jugador: azul y naranja.
En general, todo el título cuenta con un diseño artístico asombroso. Es una delicia contemplar sus componentes, tocarlos, ver cómo todo queda genial sobre la mesa… Se nota que es un producto muy pensado y tratado con cariño.
El manual, de formato cuadrado y con una primera página con estilo a periódico de la época, explica las mecánicas del juego a la perfección. Se hacen uso de imágenes ilustrativas así como ejemplos, que desvanecen cualquier duda que pudiera surgir.
VALORACIÓN
Paris: La Cité de la Lumière es un juego abstracto, pero con una temática que no ha sido pegada de cualquier forma, sino que encaja bien. Se nota que ha habido un trabajo de integración del tema y eso se refleja en los componentes: las losetas de adoquines, los edificios, las farolas y las diversas postales. Ciertamente podría haber tratado de cualquier otra cosa, pero haber elegido el París de finales del siglo XIX ha sido todo un acierto.
El título rebosa estrategia por todos sus costados. Recordemos que la partida se encuentra dividida en 2 fases. La primera es la que sirve para poner los adoquines y reservarse edificios para construir durante la segunda. Esta última fase, además de la edificación, también cuenta con la asignación de postales, que entregan acciones o efectos especiales de cara al desarrollo de la partida y/o de la puntuación final.
Todo esto teniendo en cuenta que lo importante es crear una buena aglomeración de edificios propios, así como tenerlos bien iluminados con el alumbrado público. Esto puede parecer sencillo y, en cuanto a mecánicas, lo es. Pero de cara a desarrollarlo, teniendo un rival enfrente, con el mismo objetivo, hace que la cosa cambie.
Ambos jugadores se disputarán un terreno inicial para agrupar las casillas propias y mixtas de la forma más eficiente de cara a colocar posteriormente edificios y de paso, estorbar al rival. El problema es que si quieres llevar la voz cantante en la colocación de losetas de adoquines, puede que el rival esté eligiendo los mejores edificios. Lo mismo ocurre en la segunda fase, habrá que ver si merece la pena apresurarse por colocar edificios o por elegir las postales más golosas.
Todo esto, carga sobre los jugadores de «Paris: La Cité de la Lumière» la necesidad de balancear las acciones a realizar. No siempre es bueno colocar casillas de adoquines o edificios cuanto antes. Será necesario ver cómo se desarrolla la partida, mientras no descuidas otros factores que también tienen importancia.
De todas formas debo remarcar que jugar a «Paris: La Cité de la Lumière» es sencillo. Lo difícil será ganar, en función de lo hábil que sea el rival. Lo bueno es que las partidas son bastante cortas, concluyéndose en menos de 30 minutos. Se debe tener en cuenta que no es un juego que tienda a generar AP y que su entreturno pasa en un suspiro. Por tanto, jugar de seguido la revancha es algo más que factible.
Respecto a la rejugabilidad de «Paris: La Cité de la Lumière», se debe recordar que se usarán sólo 8 postales al azar de las 12 que hay. Además, las losetas de adoquines surgirán de forma aleatoria a cada jugador. Puede parecer que esto no sea suficiente para darle una larga vida, pero nada más lejos de la realidad. Este tipo de juegos tan estratégicos, viven mucho de las jugadas que se decidan hacer y de las decisiones a tomar en cada momento. Por ello, cada partida se desarrollará diferente y siempre será muy disfrutable.
Creo que es justo remarcar las calidades del título, tanto en detalles de diseño al jugar con losetas de 2 alturas sobre un tablero en la propia caja, como en las propias ilustraciones que podemos disfrutar en las preciosas postales. El trabajo de diseño y arte que hay tras este juego merece ser aplaudido.
Por tanto, no puedo hacer otra cosa que recomendar «Paris: La Cité de la Lumière» a todo el mundo (pero ojo, que no es un filler). Creo que prácticamente cualquiera puede disfrutar de él, pues se explica rápido y es fácil de entender. Además es bonito y ocupa lo justo. Si alguien todavía no lo ha probado, está perdiendo el tiempo.